Una goma de la Combi inspiró uno de los juguetes para perro más famosos

0
Kong

Si tú, como nosotros, eres un fanático y protector de los perritos, seguramente en más de una ocasión te has acercado a una tienda de mascotas para comprarle a tu compañero un divertido juguete para pasar las tardes con él, y entre el amplio abanico de opciones, debes haber visto el cono de goma hueco Kong, uno de los juguetes para perro más famosos en el mundo por su resistencia y durabilidad. Pues hoy te vamos a contar como un antiguo Volkswagen Tipo 2 inspiró el nacimiento de este producto.

Hacia el año de 1970, el inventor del juguete Kong, Joe Markham, era el dueño de un taller automotriz en el centro de Denver, ciudad que por aquellos años presentaba un índice muy alto de robos. El mismo presidente actual de la compañía Kong, K. D. Decker comenta que en aquellos años “Denver no era un área excelente”.

Altamente frustrado por los constantes robos, Markham decidió acercarse con la policía local para solicitar que se realizaran más patrullajes en el área, sin embargo, ellos denegaron la petición debido a la falta de presupuesto, por lo que instaron al propietario a conseguir un perro guardián que se encargase de cuidar el establecimiento contra los ladrones.

Markham siempre había sido un amante de los perros y justo por aquellos días conocía a alguien que estaba dando en adopción a un cachorro de pastor alemán llamado Fritz, que no logró pasar las pruebas caninas para convertirse en perro policía por “masticar sin control”. Con la decisión tomada de proteger su negocio y de salvar al perro de terminar en las calles, Joe decidió aceptar al pequeño peludo en su negocio.

historia de Volkswagen
El tope de goma de la Volkswagen Combi que motivó la creación del juguete Kong.

Una goma de la Combi motivó a la invención del juguete para perros Kong

Apenas llegó al negocio, Fritz hizo gala de su fama de “masticador” y comenzó a morder todo lo que encontraba en el taller, aunque sus cosas favoritas para masticar eran las piedras, mismas que lastimaban su dentadura. Preocupado por ello, Markham buscó quitar esta mala maña de masticar piedras al perro dándole premios, huesos, y hasta mangueras de radiador, aunque nada era lo suficientemente duro para soportar su poderosa mandíbula.

Desesperado ante esta situación, Markham encontró la respuesta a sus problemas un buen día, cuando llegó al taller un Volkswagen Tipo 2 de finales de los años 60. Tras desmontar parte del vehículo para repararlo, un tope de goma en forma de cono bulboso quedó expuesto y al alcance de Fritz, quien no dudó ni un segundo en hacer gala de su fama de masticador, y robó la pieza para masticarla tranquilamente en su cama.

Kong
Hacia el año de 1970, el inventor del juguete Kong, Joe Markham, era el dueño de un taller automotriz en el centro de Denver.

Claramente la pieza debió ser reemplazada por Joe, pero el asombro fue mayúsculo cuando se dio cuenta de que, gracias a su composición de goma, y a su forma cónica hueca, la pieza era capaz de soportar la poderosa mordida de Fritz sin romperse, por lo que era claro que un excelente juguete para perros.

Ni tardo ni perezoso, Markham comenzó a trabajar y a probar con diferentes composiciones de goma y caucho para encontrar el grosor y la mezcla perfecta que le permitieran construir un juguete prácticamente indestructible para perros. Durante seis años experimentó y probó diferentes fórmulas químicas e incluso intentó aliarse con la mismísima Volkswagen, aunque al final no lo logró, aunque sí consiguió alianzas con fábricas alemanas expertas en el caucho, pues como dice Decker, “quería estar asociad con la calidad y la ingeniería de construcción alemana”.

Tras muchos años de trabajo, Markham comenzó a vender Kong en el año de 1976 y su primera figura fue una de muñeco de nieve. El juguete fue todo un éxito en los hogares estadounidenses debido a la alta resistencia de sus materiales, por lo que rápidamente más y más personas comenzaron a adquirirlo para sus mascotas. Es así como una pieza común de un antiguo Volkswagen inspiró uno de los juguetes para perros más famosos del mundo.

Te puede interesar: VW Fridolin, el mítico vehículo utilitario desarrollado para el servicio postal alemán

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *