Hace algunos meses, durante la esperada Gira fotográfica de Vochomanía en Tlaxcala, los aficionados al mundo Volkswagen fueron testigos de un icónico clásico: un Volkswagen Sedan 1978, perteneciente al club Ameca Volks.
Este vocho, no solo destaca por su valor histórico, sino también por las modificaciones personalizadas que lo convierten en una auténtica joya sobre ruedas.
El motor de este vocho ha sido meticulosamente ajustado con detalles que optimizan su rendimiento. Entre las modificaciones más notables se encuentran una polea graduada CB Performance, así como un enfriador de aceite discretamente escondido.
También se ha instalado un encendido electrónico, una caja de velocidades de paso largo y un escape tipo violín doble que le otorga un sonido único y característico. Todo esto, acompañado de faros de color amarillo que ayudan a mantener ese equilibrio perfecto entre lo clásico y lo moderno, mientras las placas de auto antiguo preservan su esencia nostálgica.
Interior del Volkswagen Sedan 1978
El interior y el exterior no se quedan atrás. El Sedan de Gabriel cuenta con una palanca Empi de gatillo, asientos Recaro en piel perforada, y cristales tintex que le otorgan una apariencia sofisticada.
Su techo ha sido modificado con un quemacocos ragtop, el parabrisas es abatible, al igual que las ventanas laterales, lo que refuerza su diseño funcional y elegante.
Para añadir más estilo, los estribos son de tipo billet, mientras que los rines Radar de 5 birlos y 15 pulgadas y las barras de defensa le brindan un aspecto robusto. Otros detalles como los espejos retrovisores, la suspensión ajustable, y la antena lateral completan el cuadro de un auto que combina rendimiento con estética.
Las llantas, perfectamente seleccionadas, incluyen medidas 195/60/15 en la sección trasera y 175/65/15 para el eje delantero, asegurando un agarre firme en carretera. Además, el sistema de luces ha sido mejorado con un faro de reversa, un stop adicional, y un tercer faro para mayor seguridad y visibilidad.
Finalmente, en un guiño a la tradición, el equipo de sonido permanece fiel a sus raíces con un radio original, que evoca los sonidos clásicos de otras épocas mientras este vocho recorre los caminos con un estilo renovado.
Este Volkswagen Sedan no es solo un vehículo; es una obra de arte rodante, una pieza de historia que ha sido cuidadosamente restaurada y modificada para brillar en la actualidad, y que sin duda ha dejado una huella en todos aquellos que participaron en la Gira Fotográfica de Vochomanía.
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