El estilo Nostalgia Drag Racing apareció con el boom del Old School a mediados de 1990, cuando la gente se empezó a interesar en los legendarios vochos que dominaron las competencias de la NHRA durante la década de los 60, allá en California.
La llamativa estética de estos modelos de los 60 y principios de los 70 es sumamente atractiva, y a los aficionados les costó poco empezar a copiar los coloridos diseños, aderezados con pinstrippings, acabados en metalflake, letras doradas, etc.
Los orígenes del Nostalgia Drag Racing
Con el renacimiento del interés en esa época, reaparecieron también muchos coches que se creían perdidos, como el Tar Babe original.
Para hacer un Vocho totalmente Nostalgia, hay que fijarse bien en los coches de la época, cuidando de no hacer ningún anacronismo. Las bases son, en el 99% de los casos, vehículos anteriores a 1967, mientras que las modificaciones de carrocería pueden ir desde aletas y cofres de fibra de vidrio, hasta toldos top chop, pero, siempre respetando el espíritu de época, nada de alerones.
Los rines, de manera usual, son BRM, o unos de competición, tipo Erco, aunque preferentemente se utilizan Empi. El interior de los vochos Nostalgia Drag Racing va desnudo al máximo, con solo el asiento del piloto.
Lo más importante es la pintura exterior, sin embargo, es difícil dar guías en este sentido, puesto que cada coche es un mundo, lo mejor es ver unos ejemplos para inspirarse, sobre todo pensar en un buen nombre, ya que cada coche tiene el suyo pintado en los costados.
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Emprendedor, empresario, fan del buen café y de las playas del Caribe Mexicano. Creador y Director Editorial de las revistas Vochomania, Tuning Car, Curvas, Mundo Volkswagen y muchas más. Editor en Autoproyecto. CEO de MB Digital Entertainment. #DogLover #AdoptaNoCompres