El vocho cubierto con pelotas de ping pong y otras curiosidades vocheras que no conocías

Una vez más regresamos con algunas curiosidades vocheras que probablemente no conocías.

Curiosidades vocheras: un vocho cubierto con pelotas de ping pong

Katherine Smith de Jarrettsville, ha colocado a lo largo y ancho de un Volkswagen Escarabajo 1971 ocho mil pelotas de ping pong de diferentes colores, su “obra” la tituló “The Last Cup”.

Estuvimos buscando la información con relación al por qué de este trabajo y no pudimos encontrar nada. Lo que sí sabemos es que su arte plasmado en su Volkswagen enfriado por aire ofrece diferentes escenas de la vida, siendo la “happy face” (carita feliz) y o el signo de la paz los más llamativos. Cabe resaltar que los tapones de la época y las defensas también están cubiertas con pelotas de ping pong.

Curiosidades vocheras: Afri-Cola y la Volkswagen Combi

Aunque la Combi de Volkswagen tuvo un éxito sin precedentes como vehículo de “ocio”, la realidad es que en principio fue pensado como vehículo de trabajo.

Debido a su gran versatilidad, durante años fue utilizada en muchas empresas para desempeñar diferentes tareas. Y una de esas firmas fue Afri-Cola.

La marca Afri-Cola fue registrada en 1931 y actualmente pertenece a la Mineralbrunnen Überkingen-Teinach, que intenta utilizar la estética retro para volver a introducir este refresco de cola al mercado alemán.

Cabe resaltar que, durante mucho tiempo, Afri-Cola estuvo utilizando la Combi para realizar tareas de carga y reparto de mercancía.

La Combi convertida en torre de control

Otra de las curiosidades vocheras que presentamos son estas imágenes que les presentamos pertenecen a la torre de control del tráfico aéreo perteneciente al Ex-Royal Airforce Australiano (RAAF, por sus siglas en inglés). Su base es una Combi 1967 de doble puerta y la armaron entre 1970 y 1971.

Como su nombre lo dice, esta Volkswagen Combi del 67 fue utilizada para desplegar aviones de combate Mirage y F-111 en batalla. Originalmente tenía un remolque con un aire acondicionado y su propio generador.

Recientemente fue restaurada en Darwin, Territorio del Norte, Australia, y ahora se encuentra en exhibición en el Museo de la Aviación de Australia. Dicha labor corrió por cuenta de un entusiasta equipo de voluntarios que “mantienen” dicho museo y contribuye de forma significativa en sus operaciones. De hecho, éste no existiría sin sus miembros voluntarios.