Blue Bug, una joya clásica de 1970, directo desde Yucatán

Hay muchos coches VW que definitivamente dejan una muy buena impresión y ese es el caso de este Volkswagen Sedan 70, propiedad de Samuel Servín Sánchez a quien tuvimos oportunidad de conocer hace algunos meses durante la gira fotográfica celebrada en Mérida, Yucatán, con motivo de la última edición del Festivolks Tunero y SPL, organizado en aquel entonces por la Hermandad Vochera, al mando de nuestro entrañable amigo, Gus Vega.

Captado bajo el esplendoroso sol de la capital yucateca, este Volkswagen Sedan 70 nos revela un look clásico, acentuado por el atractivo color de la carrocería, en este caso un azul de color claro, que combina a la perfección con los múltiples elementos cromados, entre ellos las defensas con topes, los biseles de faros, las molduras que adornan los estribos y los cristales y finalmente los tapones y los arillos que complementan los rines originales de acero y 15 pulgadas que en este caso se cubrieron con neumáticos carablanca.

El exterior de este Volkswagen Sedan 70 ¡enamora!

Sin abandonar el exterior de este Volkswagen Sedan 70 nos vamos a la sección trasera donde encontramos las calaveras típicas del modelo, así como la tapa debajo de la cual encontramos motor 1600 adaptado para proveer la suficiente energía al aire acondicionado. Sí, leíste bien, este vocho cuenta con aire acondicionado.

Así las cosas, nos vamos al interior del vocho de Samuel Servín, donde prosigue el mismo tema clásico que encontramos en el exterior, con el volante de baquelita color blanco y su arillo cromado, el radio A.M. localizado en el centro del tablero y un poco más abajo, la unidad de frecuencia modulada, que como todos sabemos, era equipo opcional en aquel entonces.

Más abajo encontramos el aire acondicionado de este vocho que provee el suficiente aire fresco al interior. Fuera de ello el resto del vehículo se mantiene en condiciones originales. Una muestra más de la calidad de restauración que predomina en el sureste mexicano, donde el amor por el vocho es tan grande como la belleza de Yucatán.

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